En una tarde soleada sobre la Fortaleza, Granates y Halcones igualaron 2 a 2 en un partidazo que, hasta los 33′ del ST, lo ganaba 2 a 0 Lanús. Pero en un lapso de seis minutos, y con un doblete de Nico Fernandez de por medio, los de Varela lograron llevarse un punto valioso. ¿Un plus?: la vuelta de los visitantes.
Rápidamente, los dirigidos por Ezequiel Carboni mostraron superioridad ante los de Sebastián Beccacece. A los 5′, tras una jugada colectiva entre Leandro Maciel y Jorge Pereyra Díaz, éste último logró desbordar y llegar hasta el área rival, donde fue embestido por Alexander Barboza. El arbitro Fernando Rapallini, no dudó en cobrar penal. Oportunidad que no desaprovechó el flamante refuerzo y delantero uruguayo, Sebastian Ribas, para poner a su equipo en ventaja. Estreno y gol para el ex artillero de Patronato.
Siete minutos más tarde, en un intento de ataque por parte de DyJ, Lautaro Acosta logra recuperar la pelota, desborda por la izquierda y lanza un centro que, tras rebotar en Barboza, cae en los pies de Tomás Belmonte, el propio medio-campista controla de forma impecable y mete un zurdazo esquinado, inatajable para Ezequiel Unsain. Así, Lanús se ponía 2-0.
Al mismo tiempo, se apreciaba también la tan esperada vuelta de los visitantes, la famosa guerra de hinchadas. Folklore del fútbol argentino que hace tiempo no se sentía (y se extrañaba). Los hinchas de Lanús cargaban a los de Defensa por el resultado parcial. Pero los simpatizantes visitantes, a pesar de ser ampliamente superados en número, se hacían escuchar y mostraban apoyo al equipo.
Ya para el complemento, el tramite fue de ida y vuelta. Los de Carboni, tomaron una postura conformista por el resultado favorable, jugaron con soltura. Esto se empezó a notar al rededor de los 25′ cuando Marcelo Larrondo, recién ingresado en el Halcón, conectó un centro de cabeza que se estrelló en el travesaño del arco custodiado por Guillermo Sara.
A falta de 10′, con Lanús cediendo protagonismo, lolo Miranda mete un pelotazo para Gastón Togni que, con un pase al medio del área Granate, logra conectar con Nicolás Fernandez (ingresado en el entretiempo) y así descontar para la visita. Con el 2-1 empezaban a encenderse las alarmas para los locales, y una luz de ilusión para Beccacece y compañía.
Lanús no transformó sus preocupaciones finales en ocupaciones defensivas, y lo pagó caro. En el minuto 37′ Lisandro Martínez desborda por izquierda, dejando en el camino a Marcelino Moreno, y pone un centro magnífico al medio del área que cae entre Facundo Monteseirin y Nicolás Pasquini, justo donde se encontraba Nicolás Fernández, otra vez el uvita parado en el lugar y momento justo para castigar. De cabeza y por duplicado logró marcar el tan ansiado (y merecido) empate. El delantero de 22 años se tiñó de héroe para todo el público de Varela allí presente.
Sensaciones positivas para Defensa y Justicia que logró llevarse un punto valioso, amargura y enojo para Lanús que no supo mantener el 2-0.
