Con gol de Zubriggen Unión le ganó 1 a 0 a Argentinos en La Paternal y complicó más el panorama del Bicho.
El Tatengue llegó con una idea muy clara a La Paternal: esperar agazapado (con un 5-4-1 bien definido) y salir de contra. Si bien la segunda parte del plan no dio resultados (en goles), la primera fue ejecutada a la perfección. Y por eso les bastó con un cabezazo de Santiago Zurbriggen en el amanecer del encuentro para llevarse los tres puntos a Santa Fé. Por su parte, el Bicho tuvo la pelota durante casi todo el partido, ya que la visita no se la disputó, pero no fue preciso en las pocas veces que pisó el área rival. Y aunque la derrota no fue lo más justo (Unión no superó futbolísticamente al rival) el equipo local se quedó con las manos vacías y fue muy criticado por los hinchas, especialmente en el complemento.
Pero para encontrarle explicación a esta nueva caída de los dirigidos por Ezequiel Carboni, quien ya empieza a ser muy mal visto por los hinchas a pesar de su corta estadía en el club, hay que recurrir a la obviedad de decir que en el fútbol gana el equipo que hace más goles que su contrincante. Y es que a los siete minutos del primer tiempo, el buen cabezazo de Zubriggen en un tiro de esquina, sumado a la floja salida de Lucas Chaves y una mala defensa del Bicho, marcó la única diferencia que hubo en la tarde. Tres minutos antes del 1-0 de Unión, Raúl Bobadilla había tenido la posibilidad de abrir el marcador, pero tras un error de Yeimar Gómez, la mandó por encima del travesaño.
Después del gol de la visita, el desarrollo del encuentro no cambió con respecto a lo que había sucedido en el inicio del juego. El Bicho tocaba de un lado a otro en la defensa, con alguna intervención de los mediocampistas y el Tatengue esperaba sin apuros, a excepción de alguna presión individual de Franco Soldano, Franco Fragapane o Diego Zabala cuando veían debilidad en la tenencia de la redonda (Francis Mac Allister fue al que más intentaron desestabilizar). Y cuando el local progresaba, el equipo santafesino impedía que los ataques se transformaran en jugadas concretas de gol. Sólo un cabezazo de Juan Ignacio Méndez (para el Bicho), una contra que definió Zabala (para Unión) y rebotó en Torrén, y un disparo de Pisculichi de media distancia que desvió Nereo a los 42’, fueron las ocasiones que rompieron el equilibrio que hizo monótono el juego.
En la segunda mitad, el ingreso de Gastón Verón en lugar de Bobadilla, a los 4 minutos, fue la principal atracción ya que el juvenil le complicó la tarea a Yeimar Gómez en sus primeros minutos en cancha. Sin embargo, después de un par de roces del defensor, algunos avalados por el árbitro, el pibe del semillero dejó de poner en peligro el arco rival. Un par de intentos por las bandas, de Toledo y Méndez, intentaron romper el orden que fue muy similar al de la primera mitad, pero no fue suficiente para que el Bicho cambiara el marcador. Y por lo tanto, con tranquilidad en el cierre, a pesar de que la ventaja no fue abultada, Unión se quedó con los tres puntos.
Lucas ARENAS