En esta semana ha dado comienzo el juicio a Santi Mina, jugador de la 1º plantilla del Celta, por una presunta agresión sexual a una mujer que habría tenido lugar el 18 de junio de 2017 en Mojácar (Almería). El fiscal Miguel Blasco ha mantenido su petición de 8 años de cárcel por este supuesto delito. El celtismo, según indica Galiciapress pide “prudencia”, pero en caso de ser declarado culpable y, por ende condenado, exigiría la rescisión de su contrato, en vigor hasta 2024.
El abogado de la denunciante, Iván Bolaño Pina, cuya petición es de 9 años y medio para Santi Mina y para el compañero de éste, David Goldar ya que, según Pina, a pesar de no haber participado en la presunta agresión sexual, no hizo nada para evitarla.
La abogada de Santi Mina, Fátima Magdalena Rodríguez, no ha presentado todavía su informe por falta de tiempo al posponerse la sesión. El letrado Ollé sí ha podido explicar como versión exculpatoria, es que cuando la denunciante entró en la furgoneta con Goldar lo hizo de forma voluntaria y que cuando a Mina le entró sueño se fue a dormir a este vehículo, quitándose la ropa fuera y quedándose en calzoncillos por el reducido espacio del automóvil.