En este último par de días hemos podido conocer el tremendo escándalo que ha salpicado a la Real Federación Española de Fútbol, a la que muchos acusan ahora de estar corrompida y exigen la dimisión de Luis Rubiales. De momento, no se ha establecido ninguna sanción tras la información que ofreció ‘El Confidencial’, donde unos audios inauditos hasta ahora han revelado como el famoso central del FC Barcelona, Gerard Piqué, alcanzó un acuerdo con el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, para sacar beneficios de la Supercopa de España.
Podría escribir líneas y líneas acerca del tema pero, para no extendernos, analizaremos este grave y turbio acuerdo en resumidas cuentas. Básicamente, Gerard Piqué tuvo una gran influencia en el acuerdo por el cual la Supercopa de España se trasladaba a Arabia Saudí. De hecho, Rubiales le trasladó la enhorabuena y su agradecimiento por haber contribuido en este ‘plan’ y ‘Geri’ se llevaría nada más y nada menos que una comisión de 24 millones de euros.
Como sabemos, Piqué es un hombre de negocios, pero el problema reside en que ha tratado con una organización que interviene directamente en las competiciones de fútbol en España, lo cual ha generado, lógicamente, muchas dudas y un gran enfado entre los aficionados de casi todos los clubes. Y digo ‘casi’ todos, porque los mayormente beneficiados en este acuerdo, puesto que son los que interesan al país árabe, son el FC Barcelona y el Real Madrid.
Al parecer, tanto el FC Barcelona como el Real Madrid se llevarían un mayor porcentaje que el resto de los participantes de la Supercopa de España, además de que el hecho de que uno de estos dos equipos no esté supone un menor porcentaje de ingresos para la RFEF. Tanto Barça como Madrid se llevarían 12 millones, mientras que el resto se llevaría la mitad o un porcentaje incluso menor.
Con toda esta información sobre el tapete, todo el mundo del fútbol, al menos en cuanto a aficionados se refiere, puesto que los clubes aún no se han pronunciado sobre este tema, ha especulado con la posibilidad de que los tratos entre uno de los futbolistas de uno de los equipos más importantes de España, que a su vez es uno de los mayores beneficiados en el mencionado acuerdo, con el presidente de la RFEF, que influye directamente en todas las competiciones, pues son los encargados del cuerpo arbitral y, por tanto, también cuenta con injerencia en LaLiga, puedan formar parte de un problema mayor, que podría consistir en la adulteración de todas estas competiciones.
Este escándalo no sólo trasciende por el hecho de las comisiones y los tratos entre Piqué, jugador del Barça, y Rubiales, presidente de la Federación, sino que, de forma intrínseca, podríamos estar hablando de una posible adulteración para que tanto el FC Barcelona como el Real Madrid estuvieran en dicha competición. Y esto también afecta directamente a LaLiga, puesto que hay unos requisitos para que los equipos puedan entrar como participantes.
En ambos campos hemos visto escándalos de categorías estratosféricas, como la mano de Gerard Piqué que, inexplicablemente, no se pitó frente al Villarreal, ni siquiera a través del VAR. Hemos visto decisiones muy cuestionables en favor de un Real Madrid que, sin ir más lejos, se vió envuelto en la polémica en su último partido frente al Sevilla tras la entrada de Camavinga, con una amarilla, dura, por detrás y sin tocar balón que terminó con Martial lesionado y con el centrocampista blanco en el campo.
Este es el mayor problema de todo este entuerto, el hecho de que las competiciones puedan verse adulteradas por cuestiones meramente económicas y que ahora, lógica y objetivamente, es un tema que está sobre la mesa como una posibilidad, visto lo visto tras los audios entre Piqué y Rubiales. Sin duda, una auténtica vergüenza que deja completamente ‘en bolas’ a todo el sistema futbolístico en España.