Keylor Navas brilla en el PSG, fue campeón de Champions League con el Real Madrid y es un ídolo nacional en Costa Rica. Sin embargo sus inicios cuentan una historia realmente sorprendente con el Saprissa de Costa Rica.
Año 2003, el Saprissa de Costa Rica le pagó 2000 dólares a la Escuela de Fútbol «Pedregoso» para quedarse con un desconocido joven de 17 años llamado Keylor Navas. Esa venta significó un éxito para el humilde club ya que necesitaba comprar balones para entrenar y no tenía dinero para conseguirlo. Con lo que obtuvieron, consiguieron 100 balones.
Eso no es todo, Keylor Navas se transformó años después en el mejor portero Concacaf de todos los tiempos y uno de los mejores porteros del planeta. Ojo, el gran nivel de Keylor en Europa no solo benefició al fútbol tico, sino que también al Pedregoso. ¿Por qué? Ante cada transferencia del arquero, reciben un 2.5% del pase por mecanismo de solidaridad al haberlo formado en su cantera.
De esta manera, cuando Navas fichó por el PSG desde Madrid, la humilde institución cobró cerca de 300 mil euros por la transferencia. “La idea con ese dinero es invertir en todo lo que se pueda en nuestra cancha: infraestructura, camerinos, graderías, una oficina para la escuela, materiales e inversión en la capacitación de nuestros entrenadores», confesó el presidente del club. emocionado.
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