Redactor: Abraham Medina
Heliópolis se vistió de gala para presenciar la jornada 33 de LALIGA EA Sports, esta vez en un nuevo choque entre el Real Betis Balompié y el Sevilla Fútbol Club. Un duelo histórico y, sin duda, uno de los enfrentamientos más esperados por los aficionados de la capital hispalense.
La ilusión inundó las calles de Sevilla desde primera hora de la mañana. En cada barrio, esquina o rincón se pudieron observar camisetas verdiblancas y rojiblancas que, durante un día, separaron a la ciudad por una misma pasión. Este movimiento empezó en la calle y se trasladó a los hoteles de concentración de ambas entidades, donde los seguidores aguardaban ansiosos a sus jugadores hasta la llegada al Estadio Benito Villamarín.
PRIMERA PARTE
Saltaban los protagonistas al terreno de juego y tras el himno local, cantado a capela por los asistentes, comenzó a rodar el esférico sobre el césped. Desde el primer instante se pudo apreciar la peculiar rivalidad que caracteriza a este tipo de enfrentamientos: segundas jugadas, numerosas interrupciones y errores minuciosos que determinan el desenlace del juego. Los jugadores fueron conscientes de la dificultad del partido por lo que, de antemano, estaban llamados a no caer en el olvido y mantener la concentración durante los noventa minutos.
Los primeros compases del encuentro fueron dados por los pupilos de Manuel Pellegrini que trató de mantener la iniciativa de la disputa gracias al control del juego. Este aspecto, le brindó la oportunidad a los locales de generar algunas ocasiones de peligro ante un Sevilla cauteloso que, a pesar de no encontrar los espacios, esperó su oportunidad para contrarrestar la ofensiva heliopolitana.
Un derbi es sinónimo de rivalidad y, como era de esperar, el enfrentamiento entre ambos conjuntos estuvo ligado a la alta presión. Tanto es así que una entrada a destiempo de Fornals hizo que el jugador verdiblanco viese la primera amarilla en el 6′ del partido. Minutos después, la vería En-Nesyri debido a un codazo a su rival.
No obstante, el partido estuvo condicionado por la lesión de Isaac Romero en el 12′ que, bajo las fuertes quejas del público local, tuvo que ser sustituido por Lukebakio. El delantero aprovecharía la ocasión para provocar la primera ocasión de gol del encuentro, pero finalmente la acción quedó invalidada por posición antirreglamentaria de Lucas Ocampos en el 23′.
Los del técnico chileno se adelantaron en el marcador desde la pena máxima en el 38′. Isco Alarcón asumió la responsabilidad con mucha tranquilidad y en el momento del golpeo, el silencio invadió las gradas del Estadio Benito Villamarín. Aunque Nyland adivinó el lado, la colocación a la derecha fue imposible de interceptar para el cancerbero sevillista.
Los 5′ de añadido no fueron suficientes para para modificar el luminoso y tras cumplirse la prolongación, Sánchez Martínez indicó con su silbato el final de los primeros 45′. El colegiado señaló a los protagonistas el camino hacia el túnel de vestuarios con la momentánea victoria de los locales.
SEGUNDA PARTE
Comenzó la segunda parte con la necesidad de romper las tablas por parte de los de Quique Sánchez Flores. Aún así, el Betis casi pudo ampliar su ventaja en el electrónico con un disparo de Bakambu que propició su propia lesión. Inmediatamente, tuvo que ser sustituido por William José.
En el lado sevillista, unas molestias en la pierna de Jesús Navas provocó que entrase al verde Kike Salas. De hecho, se incorporó como ‘anillo al dedo’ ya que el joven defensa pudo empatar el partido en el 55′ con un gran remate de cabeza.
La polémica se sirvió instantes después con una acción polémica que pudo haber terminado en penalti. Un ‘manotazo’ de Badé dentro del área impactó sobre el rostro de Isco Alarcón pero, tras revisar la jugada en el VAR, los colegiados consideraron que no fue suficiente.
Llegados al 70′ se produjo el cambio de Fornals por Nabil Fekir. El centrocampista francés fue aplaudido por la parroquia verdiblanca con gran éxtasis, los aficionados del Real Betis sabían que su papel en el campo era fundamental para agarrarse a la posibilidad de conseguir los tres puntos.
Se le complicó el planteamiento al Sevilla que no se encontró cómodo durante esta fase del encuentro. Aún así, después de la actuación de ambos equipos la función estaba más abierta que nunca y, sin duda, cualquier entidad pudo revertir la situación con el más mínimo detalle. Para ello, trataron de mover sus fichas en el banquillo. En el caso del Betis salió Isco, ovacionado por su afición, para dar entrada a Abde y por otro lado, entró Lamela y Juanlu Sánchez por Lukebakio y Lucas Ocampos respectivamente.
La realidad es que hasta el último minuto pudo pasar de todo, amenazó el Betis, una vez más, la portería sevillista. Esta vez con un remate de Abde que terminó interceptando en el larguero.
Concluyó el final del choque con los 5’ de añadido, los equipos sevillanos se repartieron los puntos en un derbi muy disputado en el coliseo verdiblanco.
FICHA TÉCNICA
Real Betis Balompié: Rui Silva, Miranda, Johnny, Guido Rodríguez, Pezzella, Ayoze, Bakambu, Pablo Fornals, Isco, Sabaly y Chadi Riad.
Sevilla Fútbol Club: Nyland, Sergio Ramos, Lucas Ocampos, Suso, En-Nesyri, Jesús Navas, Acuña, Isaac, Badé, Soumaré y Agoumé.
Árbitro: Sánchez Martínez, José María.
VAR: Ortiz Arias, Miguel Ángel.
A. Asistente 1: Cabañero Martínez, Raúl.
A. Asistente 2: López Mir, Juan José.
4º Árbitro: Díaz Escudero, Jorge.
AVAR: Prieto Iglesias, Eduardo.