Valencia Basket gana ante un Hapoel Jerusalem poco propositivo y suma la novena victoria consecutiva en una Eurocup que, con el paso de las jornadas, se va tiñendo de color «taronja». Un Chris Jones fenomenal y un Ojeleye siempre líder, guiaron al Valencia a seguir ganando en su competición fetiche.
Primeros y segundos del grupo B se enfrentaban en la penúltima jornada para unos (Valencia deberá jugar su partido aplazado por la DANA en enero) y última para otros, en una primera mitad de fase de grupos de Eurocup donde Valencia Basket no había dejado respiro a rival con el que se media, no siendo menos un Hapoel Jerusalem que, simplemente, no podría frenar al equipo de moda del baloncesto europeo.
Primer cuarto
Ganado el balón inicial por Valencia Basket, ni 30 segundos harían falta para que el conjunto de casa, encestase sus primeros puntos en el marcador. Una buena maniobra de Brancou Badio, ponía de forma pronta, al conjunto de Pedro Martinez, el cual recibía en, la noche de hoy, a su perseguidor por el liderato del grupo.
Cumplido el ecuador del primer cuarto, el conjunto valenciano ya había puesto tierra de por medio en un partido que no era más que clave de cara a mantener el invicto en una competición donde se le obliga a Valencia a ganarla. A base de triples (así son los partidos de este Valencia y ese es su punto más fuerte), los de casa se hacían fuertes en área rival, con un Ojeleye que derribaba rivales como si de fichas de ajedrez se tratase.
Por el lado visitante, un viejo conocido volvía a la Fonteta tras partir la pretérita temporada: Jared Harper, que cayó de pie en el proyecto valencianista, volvía a la que había sido su casa por tres campañas, empezando el partido, con 5 puntos que consiguieron arrancar algún aplauso de la que un día fue su parroquia. Pese a ser de lo más de su equipo, el jugador estadounidense, se vería sobrepasado, al igual que sus compañeros, por un Valencia que y a falta de 3 minutos, ya sacaba 9 puntos en un partido que se preveía plácido para el líder.
Llegados al ocaso del primer cuarto, pese a la relajación padecida vista a la hora de sacar balón desde atrás (la cual se vería materializada en puntos para Hapoel), Valencia Basket se mantendría arrollador, con una facilidad pasmosa de cara a acertar desde la línea de 3 y, demostrando con su fluidez en el juego, el porqué es líder indiscutido en su grupo europeo.
Segundo cuarto
Tras un primer cuarto demoledor pese a no convencer en diferentes tramos de éste, Valencia no soltaría el acelerador, colocándose 15 por encima de un rival al que poco espacio le dejaba el conjunto local el cual, no habiéndose cumplido la el cuarto de hora de encuentro, ya se encontraba cercano a firmar la media centena de puntos, dando a entender, como está ocurriendo en los últimos partidos, que el equipo no es más que un generador de puntos insaciable.
Lejos de ser un equipo medido bajo sus individualidades, los de Pedro Martínez fomentan su juego en el cooperativismo, pudiendo comprobar dicha evidencia en que, faltando poco menos de cinco minutos para acabar la primera mitad, solamente los 2 jugadores que no habían disputado siquiera un minuto (Carot y Jovic), eran los únicos que faltaban por anotar.
Faltando poco menos de dos minutos para hacer de la primera mitad, un recuerdo, el conjunto local dominaba con puño a un Hapoel que, pese a llegar con el cartel de poder competir el encuentro al equipo de casa, había pasado la primera parte, persiguiendo las sombras de un Valencia que, una vez activó el «hammer time», sería imposible frenarlo, yéndose con una ventaja de 21 puntos a una segunda donde deberían ir fatalmente las cosas para que el conjunto visitante se llevase el gato al agua en la noche gélida de miércoles.
Tercer cuarto
Con un Hapoel mucho más propósito que en la primera mitad, empezaría un tercer cuarto donde, lo último que debía permitir el conjunto local, era darle comba a un Hapoel que, dirigido por Jared Harper, se dedicaría durante los primeros compases de cuarto, a recortar distancias que llevaban a los de casa, a trastabillarse defensivamente como bien hubo ocurrido durante el ocaso del primer cuarto.
Pese al aviso a navegantes dado por el conjunto israelí, los de casa no darían brazo a torcer. Pese a bajar su ratio de triples respecto a lo visto en la primera mitad, el conjunto local se mantuvo arduo de parar en ataque aunque, y en el lado opuesto del parqué y como bien hemos comentado, se relajaría permitiendo maniobrar con facilidad a un Hapoel que, pese a verse muy por detrás en el electrónico, trastocaba el diferencial de un Valencia en una competición donde y hasta el final de la fase preliminar, nada se decide, contando como es obvio, cada punto tanto anotado como concedido
Y con un triple de Chris Jones, que se estaba eligiendo a si mismo como el líder en el partido de hoy, finalizaba un tercer cuarto el cual se caracterizo por repetir la crónica de los últimos partidos del conjunto valenciano: un equipo que arrolla mucho durante los primeros compases y que acaba cayendo en relajación, haciendo que su rival se venga arriba tanto en partido como en luminoso.
Último cuarto
Pese a que el partido se encontraba en un puño dada la fragilidad defensiva enseñada por el conjunto local en la segunda mitad, el pabellón de la Fuente de San Luis, viendo certificada la victoria de su equipo, iría mínimamente vaciándose, una vez iniciado el último tramo de encuentro.
En cuanto a lo deportivo y pese a las dudas brindadas durante la segunda parte, encajando más de lo debido, Valencia Basket volvería a imponerse cual león ante su presa, llevándose un partido que lo certificaba como aún más líder en lo que había sido, la primera vuelta de esta Eurocup.
Con la victoria en el bolsillo pese a los sustos finales, que serían espantados por un Chris Jones que firmaría 20 puntos en uno de sus primeros partidos tras su retorno de lesión, Valencia Basket se hacía aún más fuerte en una fonteta que, y desde la llegada de Pedro Martínez, se ha vuelto un feudo casi inexpugnable. ¿Dónde tiene el techo el conjunto de Pedro Martínez?