Tras más de un año sin competencias internacionales, la Bombonera volvió a vivir una noche de Copa Libertadores y fue con victoria. Un golazo de Pavón puso el 1-0 que le dio a Boca tres puntos muy valiosos frente a Junior.
La visita intentó asumir el protagonismo en los primeros minutos y le disputaba la mitad de cancha al Xeneize. El equipo de Guillermo apostaba a jugadas preparadas en pelotas paradas y centraba su ataque en Cristian Pavón, que estaba intratable. A los 17 minutos se dio la más clara de los Rojiblancos con un sorpresivo disparo de Sebastián Hernández que tapó Agustín Rossi con una destacable atajada. Sin embargo, fue una jugada aislada en un pasaje que comenzaba a tornarse más favorable al conjunto argentino.
Pavón, tras un buen pase de Emmanuel Más, quedó solo frente a David Murillo y con un toque hacia el medio le bastó para meter el zapatazo que hizo sonar el grito sagrado en la Bombonera a los 27. Boca sacó provecho de los espacios que se abrieron tras el gol y estuvo cerca del segundo con un remate de Pablo Pérez, en media hora de juego, y un mano a mano de Wanchope, al minuto 40. A pesar de no merecerlo, el Tiburón tuvo el empate en un tiro de esquina, cuando se iba el primer capítulo, pero Teófilo definió al cielo una pelota que terminó en manos del portero local.
Un cabezazo de Ábila a los 3 minutos del complemento fue uno de los pocos avisos que dio el local para intentar aumentar la ventaja. Pero, necesitado del gol, los dirigidos por Mendoza eran más ambiciosos buscando el arco rival. Ruíz a los 9 y Teo un minuto más tarde, tuvieron dos pelotas claras por errores en la defensa rival, pero ninguno pudo concretar el ansiado empate. Sin la lucidez del primer tiempo, el Xeneize asumió nuevamente protagonismo pero le faltaba precisión en el área contraria para aumentar la ventaja.
Al minuto 21, el centro delantero de Boca tuvo en sus pies la más clara en un penal que le convirtieron a él, y sin dudarlo tomó la pelota. A pesar de esta convicción, el ex Huracán pateó por encima del travesaño y la ventaja se mantenía en un gol. En el final de la noche, Junior buscó nuevamente la igualdad pero le faltó precisión y el equipo de Guillermo, con justicia, mantuvo el 1-0 a su favor.
Con un buen rendimiento del equipo, acompañado por el clima festivo del estadio, Boca sumó de a tres en un partido clave para el futuro del grupo. El triunfo fue valioso, porque el club de la Ribera se mantiene cerca del líder Palmeiras (contra quién jugará el próximo partido en Brasil) y sirve para sacar distancia de Junior y Alianza Lima (los débiles del grupo).
Lucas Arenas.