Luego del empate contra Godoy Cruz en La Bombonera, finalmente Boca Juniors explotó. El Xeneize acumula cinco partidos sin ganar en su estadio, está comprometido en su grupo de Libertadores y el funcionamiento es lamentable. En ese contexto, el Consejo de Fútbol, liderado por Juan Román Riquelme ya tendría tomada la decisión de destituir a Battaglia.
El entrenador tiene el ciclo cumplido y desde la directiva están diagramando los pasos a seguir. En las próximas horas, se le comunicará a Battaglia que no seguirá en Boca Juniors porque el equipo necesita resultados de inmediato: debe ganarle a Central Córdoba para asegurarse un lugar en la siguiente ronda de la Copa de la Liga y se jugará una final contra Corinthians en Brasil por la Libertadores.
Tras la igualdad con Godoy Cruz, Sebastián Battaglia decidió suspender la conferencia de prensa y se marchó sin hablar con los medios. La idea de Riquelme es que tras cerrar el ciclo de Battaglia, que Hugo Ibarra y Mauricio Serna asuman interinamente hasta encontrar al reemplazante directo.
En Boca esperaban un gesto por parte de Battaglia, presentando la renuncia, pero tras una llamada del Consejo de Fútbol se decidió ponerle punto final. Desde la directiva ven un ciclo gastado, sin margen de error y que se requiere un golpe de efecto inmediato.
Los nombres que estarían sobre la mesa para tomar el lugar de Battaglia serían Martín Palermo o Cristian Kily González. Para el ciclo de Riquelme en Boca, es el segundo entrenador que se va en dos años y medios de gestión.