Nacional le ganó a Peñarol en el clásico de Uruguay por 3-1 con un golazo inolvidable del Pistolero, sin embargo, hubo una actitud de Lucho en contra de su propio público para proteger al arquero del Carbonero que es para destacar.
En el primer tiempo, Dawson, arquero de Peñarol estuvo en el suelo unos minutos por una lesión y la hinchada de Nacional creyó que estaba haciendo tiempo y por eso comenzaron a arrojarle proyectiles. Uno de esos proyectiles impactó en el hombro derecho de Dawson y tuvo que ser atendido.
Luis Suárez se puso furioso, se paró de frente a la hinchada, a los gritos y las frases fueron de indignación. El Pistolero sabe que su presencia le da a los partidos de Nacional otra exposición y en su regreso al clásico la imagen de la agresión lo hizo enojar.