Isco Alarcón se fue de la peor forma del club. El mediocampista que estuvo en la época dorada, termina yéndose como uno más, en condición de libre y sin ningún tipo de homenaje. Tras esa salida, Isco firmó con el Sevilla, que lo contrató por dos temporadas y con un salario apenas superior al millón de euros, ya que su deseo era seguir jugando en España.
«Yo entiendo que haya dudas (sobre su rendimiento) por mis últimos años, que no he podido y no me han dejado jugar de alguna manera, por así decirlo. Mandar un mensaje de tranquilidad porque voy a darlo todo, estoy focalizado al cien por cien para demostrar el nivel que nunca he perdido y es un buen sitio para hacerlo. Entiendo que el sevillista tenga dudas, pero me encargaré de disiparlas», aseguró Isco.