Es uno de los jugadores más defenestrados de la actualidad en el fútbol europeo. Llegó a ser el guardameta titular del Liverpool que se plantó en una final de la Champions League y que asustaba a todo el planeta, pero varias temporadas después no para de dar tumbos y de ser uno de los jugadores abogados al fracaso inminente.
Sus errores le llevaron a salir del Liverpool y el arquero germano no ha podido asentarse ni en el Besiktas ni en el Unión Berlín. No obstante, parece que aún queda una bala en la recámara para el guardameta alemán. Se trata del Greuther Furth, del colista de la Bundesliga que sondea opciones para dar un salto de calidad a su portería. ‘The last dance’ para Loris Karius.