El Granada permanece a 4 puntos de los puestos de descenso tras la derrota de ayer en la que el Villarreal se impuso por 1-4 en Los Cármenes ante un Granada que no conoce la victoria desde hace 7 partidos y que suma, con esta última, 5 derrotas consecutivas.
El partido tuvo de todo, incluida una tangana final en la que Robert Moreno, técnico nazarí, negó el saludo a Unai Emery tras el final del partido porque, según argumentó luego en rueda de prensa, el entrenador vasco había celebrado con demasiada efusividad el cuarto gol que anotaba Moi Gómez para cerrar la derrota del conjunto andaluz.
La afición granadina está cansada de ver cómo su equipo sigue sumando derrotas liderado por un entrenador que se centra más en pataletas que en atender a un equipo que pide a gritos una figura que los guíe, pues el Granada cuenta con jugadores de la suficiente calidad y experiencia para permanecer en Primera y luchar por puestos más altos. La directiva del Granada está al tanto de la situación y es muy probable que el entrenador nazarí termine siendo destituido de manera inminente. Puede que este partido haya sido el último para Robert Moreno a los mandos del cuadro andaluz, aunque podría gozar de una última oportunidad en el partido frente al Cádiz.
