Si bien el objetivo del club capitalino pasa por renovar a Mbappé, las condiciones del jugador solo permitirían firmar un contrato corto, para poder acabar jugando en Chamartín. No obstante, una renovación, aunque fuera a corto plazo, le saldría muy cara la escuadra entrenada por Mauricio Pochettino.
Y es que tal y como apuntan desde Marca, las leyes del país galo no ayudan al PSG a acometer la operación. Primero, en Francia no existen las cláusulas de rescisión, algo que dificulta una posible venta del futbolista. La segunda piedra en el camino tiene que ver con la tributación. Y es que Mbappé ya no se puede acoger al regime d’impatriation, hecho que obliga al equipo francés a pagar un salario neto que corresponde al doble del bruto.
Finalmente, en caso de una venta a un equipo, el PSG tendrá que pagar al AS Mónaco, equipo donde militaba Kylian Mbappé hasta 2017, 35 M€, según un acuerdo al que llegaron los monegascos en la venta de su estrella.