Se ha hablado hasta el cansancio de él pero nunca con tanta certeza como ahora: Riqui Puig dejará posiblemente el FC Barcelona cuando finalice este curso 2021-22 para buscar suerte en otro club en donde, básicamente, juegue. Sí, el principal problema de este futbolista de 22 años es que el tiempo y los entrenadores pasan y siempre obtiene el mismo resultado: nula participación.
Todos se ilusionaron con Quique Setién cuando este llegó a la dirección técnica con que le daría minutos a Riqui Puig, los que no le dio Valverde anteriormente. Pero no fue así, ni con Setién, ni con Koeman, que lo sentenció casi de entrada y lo tildó de topo, ni mucho menos con Xavi Hernández. Con el actual DT se tenia la esperanza, la fe casi ciega de que Riqui Puig por fin tendría ese protagonismo que todos creen que él merece por ser «una futura estrella» pero la realidad es que todos los entrenador y Xavi también pasan de Riqui.
Semanas atrás Riqui Puig había declarado lo de siempre: que apuesta por la paciencia. «Barcelona es mi ciudad, tengo a mi familia y a mis amigos. Estoy muy contento y quiero triunfar aquí. Es verdad que ahora la gente tiene un poco más de prisa, pero hay que ir con tranquilidad. Seguiré trabajando y entrenando para ver si tengo alguna oportunidad más». El tiempo se agota, sin embargo.
Por ello, desde Mundo Deportivo adelantan que «Riqui Puig tiene decidido salir del Barcelona en este verano (europeo)». Ha tenido ofertas en el pasado, con el Betis a la cabeza, pero nunca quiso apurarse ya que, justamente, desea encontrar un equipo en donde pueda jugar de manera regular. Ya van más de dos temporadas en donde es apenas un testigo desde el banco de suplentes, mientas otros juveniles como Ansu Fati, Gavi, Pedri y Nico, por mencionar a unos, han avanzado mucho más que él.
El Barcelona debe resolver lo contractual. El actual vínculo termina el 30 de junio de 2023 y si se va a ahora en un traspaso final el club no sabrá mucho más de él en el futuro. En cambio una renovación podría seguir uniendo a Riqui Puig al Barça por varios años más. Así se daría una cesión para darle calor y, si regresa en buena forma, transformarse en un titular habitual. Esperanzas en Riqui Puig hay, pero debe jugar para ganar experiencia.