Real Madrid ya empieza a planificar la próxima temporada. A pesar de tener la liga en el bolsillo y estar más vivos que nunca en Champions, tras la dura derrota ante el FC Barcelona en el Clásico, en el Bernabéu ya han empezado las reformas. Con la previsible llegada de Mbappe, se espera que lleguen por lo menos uno o dos cracks más para fomentar la competencia en el resto del campo. Pero para ello, hace falta generar espacio en la plantilla, para lo cual el Madrid se dispone a intentar la salida de varios futbolistas.
Hay tres salidas que apuntan a ser tres huesos duros de roer para la dirección del club blanco: Hazard, Mariano y Jovic. Cada caso con sus particularidades, pero con un factor común: son tres jugadores de salarios elevados que generarían un ahorro importante, algo fundamental para acometer las operaciones que el Madrid pretende para este verano. Hazard percibe unos 30 millones brutos por temporada, Jovic 10 y Mariano 9. En total, son casi 50 millones de masa salarial para tres jugadores que apenas cuentan: entre los tres no suman ni 1.600 minutos.
Por otro lado, las tres salidas que están claras, ya que terminan contrato son: Gareth Bale, Marcelo e Isco. Tras varias malas temporadas y dudosos estados de forma, no han contado nada para Ancelotti este año, apenas suman 1.200 minutos ente los tres. No renovarán, dejarán el club tras haber sido importantes en la etapa más gloriosa y generarán un espacio salarial importante: 60 millones de euros, pues Bale cobra 30 brutos al año, Marcelo, 16 e Isco, 14.
Otros de resolución bastante más sencilla, son Vallejo y Ceballos, ya sea por tratarse de salarios considerablemente más bajos y de jugadores más abiertos a marcharse sin poner dificultades. El primero de los dos, Vallejo, sabe que no cuenta y sus agentes le buscan una salida, en la que el Madrid le dará facilidades, teniendo como tiene en la cantera centrales que pueden hacer ese rol de cuarto zaguero de la plantilla, como Marín, Pablo Ramón o Gila.
El otro es Dani Ceballos, al que una lesión le impidió buscar pretendientes el pasado verano, un problema agravado por sus propias ansias de jugar la final de los Juegos Olímpicos. En su caso, parece seguro que el Betis hará una propuesta en verano.