Más allá de no querer señalar a ningún futbolista, no hay dudas que el gran responsable en la caída del Chelsea FC en la final de la EFL Carabao Cup fue Kepa Arrizabalaga. ¿Por qué? Porque el portero español ingresó en los últimos minutos del segundo tiempo extra exclusivamente para atajar los penales.
Con un Edouard Mendy cansado por su extraordinaria actuación en los casi 120 minutos, Tuchel decidió una fórmula que ya le había funcionado antes. esta vez no fue así, ya que Kepa erró su penal, el último, el que decidió el título, y así festejo Liverpool.
Y aunque no directamente por esto, se supo poco después que el Chelsea quiere vender cuanto antes a Kepa, al que ya se le puso precio: «60 millones de euros«, unos 67 millones de dólares americanos. Una cifra menor de lo que se pagó por su fichaje hace años al Athletic de Bilbao. El Daily Star asegura que el Newcastle United está muy interesado en el portero vasco y una operación no se haría tardar en el verano que viene, entre julio y agosto.