El fichaje más caro en la historia del FC Barcelona. 135 M€ fijos desembolsados en el mercado invernal de 2018 para, entre otras cosas, cubrir la vacante dejada por Neymar. Pero en agosto de 2019 estaba ya cedido en el Bayern Múnich y un año más tarde anotaba gol en la humillante goleada de los bávaros a los culés en Libsoa.
Autor de 2 goles en 16 partidos este curso, se marchaba cedido al Aston Villa en enero. Todo ventajas: Steven Gerrard lo quería, los azulgranas debían ahorrarse su alta ficha y el jugador tenía la oportunidad de volver a la canarinha, pensando en el Mundial del próximo otoño. De hecho retornó y jugó a gran nivel en la última ventana de selecciones de la semana pasada.
Apenas suma 2 partidos con los villanos pero ya ha visto portería. Y ha exhibido un notable nivel en esta escuadra, la cual como sabemos se guardó una opción de compra por él. Aunque de momento lo único claro es que ha vuelto a sonreír en su retorno a la Premier League, a un equipo donde tiene un protagonismo que nunca logró en el Camp Nou.
Se llevan pocas semanas de competición desde su fichaje pero se intuyen ya cambios en este jugador. Sobre el que el combinado azulgrana no pierde detalle, especialmente para saber si esta puede ser una buena manera de acabar zanjando su etapa en el club de forma definitiva.