Roman Abramovich ha decidido vender el Chelsea. Lo ha hecho reaccionando a la invasión rusa a Ucrania. Durante los 19 años que ha sido dueño del club, el oligarca ha colocado al Chelsea entre los clubes más importantes del mundo. De este modo, su salida dejará un notable vacío en Londres y su sucesor no tendrá fácil el poder igualar sus hitos.

Muchos jugadores también lo echarán de menos. Entre estos se encuentra N’Golo Kanté, que ha reconocido en Sky Sports que la salida “es algo para lo que los jugadores no estábamos preparados, pues sucedió rápidamente”. Lo hizo antes de añadir que tanto él como sus compañeros lo único que pueden hacer ahora es darlo todo sobre el campo.

“Nosotros no controlamos estas cosas. Lo único que podemos hacer es dar lo máximo como siempre hemos hecho. Eso significa jugar al fútbol al mejor nivel posible, por nosotros, por el club, por la afición y ver cómo van las cosas, que es lo único que no podemos controlar”, añadió.