Para muchos, en la actualidad, el mejor zaguero del mundo es Antonio Rudiger. El defensor del Chelsea despliega una solidez tremenda, que potencia al equipo de Tuchel y como si fuera poco, en muchas ocasiones usa el juego sucio para intimidar a los rivales. Junto con Van Dijk (Liverpool), Rudiger pasó a ser el defensor más rudo de la Premier League.
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Pero al alemán le costó llegar a este momento porque creció en la extrema pobreza: «Ser rico era tener comida, algo que beber. Si en la mesa había pollo, eras rico ese día, amigo. Le pedí dinero a mi madre, era para un viaje escolar, algunos euros, pero no me dio nada».
En una entrevista con The Players Tribune, Rudiger reveló: «Recuerdo que lo que me hirió no fue que me dijo que no, sino su cara, me rompió el corazón que me quería dar dinero, pero no podía. Ahí me dije, debes ser un hombre ahora. Tenía ocho años. Aunque algunos fuera del barrio puedan pensar que exagero, otros dicen ¿Ocho? Qué suerte, yo tenía seis».
Ahora la situación de Rudiger es totalmente distinta. El defensor alemán termina su contrato en junio del 2022 con el Chelsea y el club inglés no quiere perderlo por nada. El nuevo contrato que ofrece Chelsea es de 9 millones de euros porque el Real Madrid y el Bayern Munich quieren tener a Antonio y aprovechar que queda libre.
La postura de Rudiger es tener un contrato más alto todavía de lo que ofrece Chelsea aunque medios británicos aseguran que su deseo es dejar una huella en el Bayern Munich. Lo cierto es que Antonio pasó de no tener nada a ser uno de los mejores defensores del mundo.
