Racing goleó a Aldosivi por 5-0 en los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional. A pesar de que el resultado fue inobjetable, Martín Palermo protagonizó un tenso cruce con el árbitro del encuentro, Yael Falcón Pérez, cuando se retiraba rumbo a los vestuarios en el entretiempo.
«Pedí ayuda. Mirá que yo estuve del otro lado, eh», le dijo el Titán al juez principal al cabo de la primera parte, a los gritos en la manga. El entrenador del Tiburón, que en ese momento caía 2-0 por el doblete de Carlos Alcaraz, no se fue para nada conforme con el arbitraje del partido y se lo hizo saber.