Aunque se trate de la ciudad más densamente poblada de los Estados Unidos, haya cerca de 11 mil habitantes por kilómetro cuadrado y la gente se choque en medio de los imponentes rascacielos, dos fanáticos de River se propusieron encontrar aAgustín Palavecino en Nueva York. Y, delicias del hiperconectado siglo XXI, lo hicieron contactándolo a través de las redes.
“Estoy buscando por todos lados a @APalavecino8 en Nueva York para una foto y decirle lo crack que es pero es imposible. Si lo encuentro, mi viaje estará completo y lo voy a obligar a que se quede en River”, tuiteó como carnada Pablo Pérez (”eso me va a perseguir siempre”, se lamentó en broma ante Olé uno de los aventureros hinchas). Y algunas horas después, mientras disfrutaba de una hamburguesa junto a su hermano Gonzalo, sonó su celular. Del otro lado había un mensaje de un tal Agustín, que los domingos se pone la 8 de la Banda y se encontraba disfrutando de las vacaciones en la Gran Manzana. Aún sin poder creerlo, Pablo pegó un grito que sorprendió al resto de los comensales en ese barcito de las calles de Manhattan.
Los invito a conocer el final de esta maravillosa historia. Humildad y grandeza @APalavecino8 https://t.co/co00dVbw1o pic.twitter.com/TlIZrvZ8Ur
— Pabloiperezz (@ppabloiperezz) 30 de diciembre de 2021
Pablo y Gonzalo, quienes pasaron de alentar a River en la San Martín Alta a jugar en el equipo de fútbol 11 de la filial del club en Barcelona, llegaron hace algunos días a Nueva York para pasar las Fiestas. Y mitad en broma, mitad en serio, empezaron a rastrear el paradero de Pala a través de las historias de Instagram de su pareja.
“Siempre estaban por los mismos lugares que nosotros, pero no los podíamos encontrar”, cuenta Pablo. Y con la misma movilidad que Agustín muestra en la mitad de la cancha, los Pérez pusieron en marcha el plan. Hasta que un día, incrédulo, se encontró con que el primo de Erik Lamela le había mandado un mensaje a Instagram: “Hola Pablo, ¿cómo estás? Vi tu Twitter. Si querés nos encontramos y hacemos la foto”.