l partido de Lionel Messi contra Uruguay quedará seguramente en la historia. El crack del PSG hizo prácticamente lo que quiso, incluso un gol involuntario en una jugada en donde originalmente asistió a Nico González, quien no llegó pero sí confundió a Muslera, para que todo culminara en el primer tanto argentino.

Ese gol fue el que abrió el partido. De allí en adelante Argentina arrolló a Uruguay. La superioridad fue muy grande y se vio sobre todo en la marca que se le hizo a Messi. Los futbolistas uruguayos mostraron un gran respeto por el 10 y lo seguían a todos lados, a veces descuidando a otros.

Así llegó esa imagen de Messi con siete uruguayos atrás (en la foto se ven solo seis) que derivó en el tercer gol, de Lautaro Martínez. Messi intentó maniobrar dentro del área chica Celeste, aprovechó que la atención estaba en él y se la pasó a De Paul, quien asistió perfectamente a Lautaro.