Los capitanes de la selección española, el pasado lunes 4 de septiembre, decidieron, mediante un comunicado, mostrar la posición que mantienen todos los jugadores en conjunto, respecto al polémico beso de Luis Rubiales.
Fue el primer capitán Morata, quien tomó la voz del combinado español, para justo antes del primer entrenamiento y según indica El País, después de 3 horas de reunión entre los 24 convocados, dejar claro que
“Rubiales no ha estado en altura de la institución a la que representa”.Dos semanas después de lo sucedido en la celebración del Mundial de Australia y Nueva Zelanda, la selección española masculina volvía a una convocatoria. Lo primero que harían los jugadores a su llegada a Las Rozas, fue reunirse para buscar un punto común y poder emitir el comunicado lo antes posible, pero este para muchos ha resultado ser insuficiente. Un escrito donde rechazan “los comportamientos inaceptables de Rubiales”, pero donde la gente condena que no hayan pedido la dimisión de Rubiales o que ni siquiera nombrasen a Jenni Hermoso.Incluso la ex internacional española, Vero Boquete, ha querido mostrar su disconformidad con los jugadores y ha dejado claro que “es insuficiente y llega 15 días tarde”.
Tras las críticas recibidas contra el comunicado, esta mañana en rueda de prensa, varios medios le preguntaban a César Azpilicueta acerca de lo ocurrido. El actual futbolista del Atlético de Madrid, respondía ante los medios y en cuanto a la situación extra deportiva que se estaba viviendo en esta convocatoria, decía lo siguiente: “siento la responsabilidad de intentar luchar por una sociedad mejor y de ser ejemplo para las próximas generaciones”.
Artículo de Kevin Barquin
