Villarreal- Real
Sociedad: la Real da el primer espadazo a la “era Marcelino”.
Por Quique Monleón Ciurana
Primer tropiezo y clamoroso de la era Marcelino donde ase ha visto que sin gol no hay paraíso.
Un partido de aspiraciones era lo que se jugaba en la Cerámica el día sábado 9 de diciembre. Villarreal y Real Sociedad llegaban en dimámicas heterogéneas a lo que lo que era la jornada 16 de la liga EA SPORTS para ambos conjuntos. El conjunto dirigido por Marcelino, que tras dos experiencias nefastas con Setién y Pacheta, se encontraba en la zona más baja de la clasificación, parece haber retomado el vuelo sumando tanto en Europa como en lo nacional donde se media a una Real que, ya clasificada paras los octavos de la Champions, se encuentra en la caza y captura de esas posiciones de que a día de hoy, las preside un Barcelona escoltada por el máximo rival de los guipuzcoanos, un Athletic Club que, con su buen inicio de temporada dan a tender que serán un hueso duro de roer para una Real que sueña con adjudicarse esa plaza Champions una temporada mas a expensas de lo que se haga esta temporada donde se ha empezado correctamente
En lo que respecta al Villarreal, tras un inicio cuestionable con Marcelino, donde se sufrió para ganarle al Zamora en la competición copera, el equipo no ha perdido en los 5 encuentros que Marcelino ha llevado al equipo empatando 2 y ganando ante un rival por la zona noble de la liga como lo es el Osasuna. Al encuentro se llegaba con 17 puntos y a expensas de lo que hice un deportivo alavés que perdería ante las palmas, equipo revelación hasta el momento que dejaba a los de Luis García Plaza sin la posibilidad de adelantar a un Villarreal que tenia el partido de la noche de hoy como una final para saber el rumbo de esta temporada: puerta grande o enfermería.
En lo que respectaba a la primera parte, el Villarreal, pese a tener el cartel de no favorito, entraría fuerte en un duelo que si acababa decantándose por el lado aldeano, significaría el plus final para el inicio de una época Marcelino más que correcta. Los primeros ataques del conjunto amarillo llegarían por parte de uno de los hombres de moda, Jose luis morales quien, con 7 goles en 4 partidos, es una de las figuras más que a destacar en lo que respecta al futbol español al igual queuno de los jugadores a ver en lo que es España, Blais Méndez, futbolista cotidiano en lo que respecta al futbol de la selección y quien había caído de pie en el esquema de Imanol Alguacil, debería salir retirado del encuentro tras el encontronazo ante un Capoué que, con su envergadura, tumbó al futbolista gallego haciendo que acabase siendo sustituido por un Turrrientes que sigue aprovechando los minutos que su técnico le brinda, firmando un duelo mas que notable y acaparando posibilidades para jugar en el importante duelo que la Real disputa esta semana ante el Inter de Milán jugándose la primera plaza del grupo D de Champions League.
Después del ecuador de un partido que estaba sirviendo un somnífero para los menos valientes, otro de los futbolistas que suma muchos galones para estar entre los convocados de Luis de la Fuente, Mikel Merino, que ya nos tiene acostumbrados a sus magníficas actuaciones, batiría en duelo mediante lo aéreo a un Jorgensen que nos estaba sorprendiendo con su buen juego de pies y distintas paradas de mérito, no podría hacer nada ante el cabezazo de un pamplonés que no es más que el ancla de un equipo que va viento en popa a repetir la gesta liguera del pasado año usurpando la plaza Champions a un Sevilla que a día de hoy, lo ve complicado para alcanzar glorias pretéritas.
Cuando el gol de Merino seguía celebrándose en la grada visitante de la Cerámica, no sería otro que Zubimendi, quien nos tiene acostumbrados a brillar con la selección española a causa de su buen juego entre lineas y lectura de los partidos, quien encontraría oro en un pase dado por Kubo y profanaría de nuevo la portería de un Jorgensen que no seria la ultima vez que acabaría recogiendo la pelota del fondo de las mallas en lo que a primera parte correspondía. Pese a tener un cómodo 0-2, la Real no se echaba y Kubo, quien no contento con haber dado una asistencia, daría juego, set y partido haciendo que el termómetro del encuentro subiese a centígrados incalculables desembocando en pitos por parte de una afición local que, aun no deja ido de animar en la segunda mitad, dejaría algún que otro pito en contra de la mala gestión que los futbolistas groguets estaban perpetuando sobre el campo.
Iniciada la segunda parte y con un Villarreal algo menos nervioso y pausado frente lo visto en la primera mitad, se lanzaría al abordaje para ver si algo podía ser cambiado frente a lo visto anteriormente. Con la entrada de Akhomach o Sorloth, el Villarreal ganó en profundidad y ocasiones generando peligro a una Real Sociedad que no sintió pavor teniendo a Remiro bajo los palos quien sacando ocasiones claras como una vaselina a Gerard Romero o envestidas desde la frontal, no tuvo demasiado trabajo en una tarde donde fue un espectador más en el reciento castellonense.
La Real por su parte, también tuvo oportunidades para hacer de su goleada algo más enorme, siendo Jorgensen quien frenaría el bochorno y la cuenta negativa de un Villarreal que ya mira a su próximo encuentro que no será en otro feudo que el Bernabéu donde deberá medirse ante el líder de la liga, el Real Madrid. Pese a ser un partido, a simple vista complicado, los de Marcelino ya saben lo que es ganar allí habiendo cuajado la pasada campaña un 2-3 donde saltaron chispas entre Alex Baena, desaparecido hoy y Fede Valverde, quien adjudicó un puñetazo al jugador de Roquetas de Mar.
En lo que a la Real supone, los de Imanol tendrán un duelo por las plazas europeas ante un Betis que viene lanzado tras pasar como primero de grupo en Europa League y empatar ante el futuro rival del Villarreal, el Real Madrid que no pudo dar un golpe contra la liga y vivirá a expensas de o que haga el Girona en Montjuic.