Quique Monleón Ciurana
La Cerámica acogerá un duelo de vértigo donde ambos clubes ansían sumar de tres y romper la racha de 5 partidos consecutivos sin ganar (que comparten) para así, alejarse de la zona roja en la que están sumidos ambos equipos desde que arrancó la presente temporada.
Por un lado, Pacheta, quien pudo encontrar su primera victoria como entrenador groguet en un agónico partido de Europa League, no podrá contar con Coquelin, Yéremi Pino, Denis Suárez o el sancionado Baena (quien cumple una sanción de dos partidos tras su expulsión en el empate contra el Getafe) Mientras que Luis García Plaza no tendrá disponible ni a Giuliano (lesionado de gravedad en pretemporada que se perderá lo que resta de temporada) y Javi López quien, tras haber logrado la confianza del entrenador madrileño, se perderá el partido por una contusión ocurrida en el pretérito partido de liga frente al Real Betis.Villarreal y Alavés se la jugarán teniendo que librar una batalla más que agónica para salir del calvario en el que están sumidos.
Con unos registros idénticos (de ahí que se encuentren 16 y 17 clasificados en la tabla), deben salir a morder en un partido que se prevé clave para lo que será la futura pelea por la salvación puesto que si a los locales no les da por sacar una victoria, habrá que ir teniéndoles en cuenta en la melé que es la zona roja de la clasificación.
El partido del domingo será la decimotercera vez en la que valencianos y euskaldunes se enfrenten (5 victorias para los groguets por 7 victorias de los babazorros) teniéndonos que ir a la temporada 21-22 (puesto que el Alavés estuvo en segunda la anterior campaña) para ser deleitados con el último enfrentamiento entre ambos (hasta la fecha del próximo domingo) donde en Mendizorrotza el Alavés sumaba 3 puntos que no le acabaron de servir para salvar la categoría. Todo está por ver entre dos equipos que cuentan con futbolistas más que preparados para deleitarnos con una genial tarde de fútbol que promete ser una batalla por el principal objetivo con el que cuentan ambos equipos en el momento: contentar a sus aficionados de manera coetánea a alejarse de las infernales zonas de descenso. Todo esto y más lo sabremos cuando el balón deje de rodar a la orilla del Río Millares.